ensayo DESARROLLO COGNITIVO Y EDUCACION

DESARROLLO  COGNITIVO Y  EDUCACION

El desarrollo cognitivo y la educación las podemos ver desde el conocimiento de BRUNER, basándose en una de las siguientes cuestiones tal como;
Sin las influencias educativas el desarrollo humano no sería lo que es.
De otra manera la intervención educativa es el factor determinante de lo que ha de ser el curso evolutivo, su forma y contenido. En los planteos de Bruner, desarrollo y educación están íntima e indisolublemente imbricados entre sí. Ya que asi podemos decir que el desarrollo es un proceso socialmente mediado, asistido, guiado en el que, en consecuencia, el papel de la educación y de los procesos educativos es crucial.
La educación es una forma de diálogo, una extensión de éste, en el cual el niño aprende a construir conceptualmente el mundo con la ayuda, guía, “andamiaje” del adulto. Tal diálogo varía en forma y objetivos en función de una serie de variables cruciales. Teniendo en cuenta también que el papel de la educación consiste en guiar el desarrollo por unos derroteros determinados culturalmente definidos: a través del proceso educativo, los adultos van aportando al niño “andamios”,  “prótesis” en las que puede apoyarse para avanzar en el proceso de su incorporación de la sociedad. 
Los procesos cognitivos y la educación siempre han estado involucrados desde el principio, para que un ser humano pueda aprender y educarse en una sociedad que así lo exige depende de procesos como la memoria, la atención, la inteligencia, el pensamiento entre otros. Los procesos cognitivos y la educación siempre han estado involucrados desde el principio, para que un ser humano pueda aprender y educarse en una sociedad que así lo exige depende de procesos como la memoria, la atención, la inteligencia, el pensamiento entre otros. Al referirnos a los procesos cognitivos entran en juego problemas como el de la creatividad en la invención de sistemas de codificación eficaces y válidos para aplicarlos a la información dada y también a la capacidad de discernir cuando resulta apropiado aplicarlos.
Vivimos una época caracterizada por grandes cambios, giros e imprevistos causados por la modernidad y la implementación de tecnologías a las diferentes actividades humanas, incluida la educación.  La transformación de la educación debe incluir los elementos mínimos necesarios para embestir los nuevos retos; si los conocimientos son temporales no significa que no deban aprenderse sino que estos no deben ser el fin por sí mismo sino más bien el mero pretexto para desarrollar el pensamiento. Es decir,  la educación se debe promover a través de un modelo estratégico y contribuir con los estudiantes para que estos adquieran habilidades por encima de conocimientos.
El desarrollo del pensamiento debe ocupar un lugar primordial en la educación de nuestro tiempo. Esto implica conocer la naturaleza  del pensamiento y lo que debe entenderse como el acto de pensar. Debemos darle impulso desde la atención a las habilidades básicas que han sido ignoradas o menospreciadas  por considerarlas ajenas a los propósitos educativos, como la memorización o la lectura; rescatando de ellas los buenos atributos. Es necesario enseñar las mejores formas para procesar información y sacar el mayor  provecho de esta cualquiera que sea el medio de llegada al cerebro transformándola en aprendizaje y estimulando procesos mentales cada vez más reflexivos y complejos. Es el momento de hacernos conscientes que uno de los objetivos educativos más importantes de la educación es enseñar a pensar
La historia del desarrollo del lenguaje es la historia de la búsqueda conjunta del significado de la experiencia entre un niño pequeño y los que le cuidan. El papel del adulto o cuidador que culturalmente se identifica en muchas exposiciones con "la madre" es fundamental como fuente y receptor de la información. Es "la madre" quien interpreta los primeros llantos, establece los primeros patrones de diálogo, imita los primeros balbuceos y proporciona los primeros modelos fonológicos y referenciales.
La educación: Es una forma de diálogo, una extensión de éste, en el cual el niño aprende a construir conceptualmente el mundo con la ayuda, guía, “andamiaje” del adulto. Tal diálogo varía en forma y objetivos en función de una serie de variables cruciales (núcleos de preocupación relacionados con la educación
La edad del niño: tanto en un bebé como en un niño escolarizado, se dan situaciones educativas en las que el adulto actúa como su tutor, pero las características de aquel relacionadas con su edad, capacidad de comprensión, intereses, introducen diferencias esenciales.
La cultura del niño y la cultura escolar: (aquí Bruner-Palacios hacen una distinción que me parece cargada de tintes funcionalistas y evolucionistas, no aportando evidencias empíricas.
El papel de la educación consiste en guiar el desarrollo por unos derroteros determinados culturalmente definidos, a través del proceso educativo, los adultos van aportando al niño “andamios”,  “prótesis” en las que puede apoyarse para avanzar en el proceso de su incorporación de la sociedad.
Dimensión evolutiva de la educación-escuela: hay una difícil problemática en el ajuste entre:
• Lo que se transmite al niño y la forma de transmisión y,
•Aquello que el niño está capacitado para aprender y los procedimientos de que dispone para la realización del aprendizaje.
En esta cuestión, Bruner adopta una postura más cercana a Vygotsky que a Piaget, mediatizada por su forma de concebir el desarrollo cognitivo como un proceso de fuera hacia adentro (de la cultura, de los otros, hacia el individuo, hacia el yo) y no como un proceso de dentro hacia afuera. El papel de la educación es alentar el desarrollo, guiarlo, mediarlo. La educación es un proceso por el que la cultura amplifica y ensancha las capacidades del individuo, y para ello es necesario que se realice una transferencia de elementos que están fuera de él.
Existe una versión apropiada de cualquier destreza o conocimiento que pueden ser aprendidos a cada edad, en cada nivel que desarrolla, el contenido fundamental del aprendizaje debe estar constituido no tanto por detalles más o menos superfluos, sino por la estructura fundamental de las materias o cuerpos de teoría o de destrezas que el niño ha de aprender, estructura que debe ir ampliando su alcance y profundidad a medida que las posibilidades de desarrollo y aprendizaje del niño así lo permitan
Resulta entonces que un plan de estudios ideal es aquel que ofrece, a niveles cada vez más amplios y profundos, unos contenidos y procedimientos siempre adaptados a las posibilidades de aprendizaje y desarrollo infantil
La actividad cotidiana del adulto como educador: el adulto estructura situaciones, prepara materiales retadores para el niño, y luego, aporta elementos que ayuden a construir una respuesta al problema que se plantea, de tal forma que con las nuevas exigencias, vienen también nuevos apoyos. Dado que la educación es un esfuerzo por contribuir a dar forma al desarrollo, la labor de guía, de tutoría, de estructuración de situaciones, y de relaciones cobra un especial significado. Aquí son importantes: los materiales, las situaciones de aprendizaje, el adulto, pero esto no significa que el profe La actividad del alumno: su curiosidad, imaginación y creatividad, intereses y motivaciones, deben encontrar ocasión de manifestarse y desarrollarse, y de hacerlo en el contexto de las situaciones educativas diseñadas por el adulto. Dado que el desarrollo es entendido como resultado de los procesos de interacción guiada, todos estos factores que expresan la individualidad del niño ocurren en el interior de un marco en cuya organización y funcionamiento el profesor juega un papel clave.
Factores no cognitivos: la educación debe contribuir al desarrollo social y emocional de los alumnos.
Tratamiento de las diferencias individuales: para cumplir con “el cultivo de la excelencia” en cada alumno, no en un sentido elitista, sino que la educación contribuya a que cada alumno alcance el desarrollo óptimo de sus posibilidades en cada momento evolutivo. Ello obliga a una “personalización del conocimiento” que considera diferencias tan importantes como los sentimientos, valores, motivaciones, nivel de desarrollo real y potencial.
Estadios del Desarrollo Cognitivo, según Jean Piaget
El niño nace como un organismo biológico, con una
Estructura psicológica. Se le atribuye tres conductas
Instintivas:
a). Impulso de nutrirse, capacidad de buscar alimento
b). Impulso hacia un sentido de equilibrio
C. Impulso hacia la independencia
LAS ETAPAS O ESTADIOS:
*      sensorio motora
*      pre-operatoria
*      operaciones concretas

*      operaciones formales


DESARROLLO COGNITIVO Y EDUCACION


LA Enseñanza o educación, es una  presentación sistemática de hechos, ideas, habilidades y técnicas a los estudiantes. A pesar de que los seres humanos han sobrevivido y evolucionado como especie por su capacidad para transmitir conocimiento.


Vivimos una época caracterizada por grandes cambios, giros e imprevistos causados por la modernidad y la implementación de tecnologías en las  diferentes actividades humanas, incluida la educación. Pienso que los educadores deberían primero identificar los verdaderos retos que se presentan en la educación para así ser parte de este importante proceso humano.

 Es claro que la educación actual ya no se consuela únicamente con una buena clase, por muchos conocimientos que se manejen en ella o por mucho ingenio que el docente quiera o pueda poner para seguir enseñando lo mismo. Es necesario considerar que los conocimientos parecen tener fecha de término. Lo que hace algunos años era verdad absoluta ahora es cuestionable o puede explicarse desde otra perspectiva; lo que hace algunos años era conocimiento útil ahora ha sido desplazado o reemplazado, debido a que los jóvenes de hoy en día se basan mas en la parte tecnológica, no quiere decir que esto sea malo por el contrario es de gran utilidad, pero, hoy en día los jóvenes buscan todo tipo de información en las redes sociales copian y pegan pero no se toman la molestia de leer de retroalimentar la investigación que han hecho, de poner sus puntos de vista.

La carrera tecnológica es insostenible a nuestro paso haciendo que las necesidades en el mundo moderno cambien más rápido de lo  imaginable. La educación requiere entonces de  elementos indispensables para hacer frente al presente pero sobre todo para hacer frente al futuro, en otras palabras, la educación requiere transformarse y son las necesidades actuales y futuras las que deben servir como agentes de cambio para esta transformación.

 La transformación de la educación debe incluir los elementos mínimos necesarios para embestir los nuevos retos; si los conocimientos son temporales no significa que no deban aprenderse sino que estos no deben ser el fin por si mismo sino más bien el mero pretexto para desarrollar el pensamiento. Es decir,  la educación se debe promover a través de un modelo estratégico y contribuir con los estudiantes para que estos adquieran habilidades por encima de conocimientos. El acto educativo debe darle mayor peso al procesamiento de la información y no solamente a su almacenamiento. Como dice García Hoz “sin memoria no hay posibilidad de vida humana, pero la memoria sólo no es equivalente al pensamiento” (Pérez-Rosas, p.7). Es la modificación de los objetivos y la búsqueda de estrategias más apropiadas para alcanzarlos,  la tarea mayor de los educadores. 


            
El desarrollo del pensamiento debe ocupar un lugar primordial en la educación de nuestro tiempo. Esto implica conocer la naturaleza  del pensamiento y lo que debe entenderse como el acto de pensar. Debemos darle impulso desde la atención a las habilidades básicas que han sido ignoradas o menospreciadas  por considerarlas ajenas a los propósitos educativos, como la memorización o la lectura; rescatando de ellas los buenos atributos. Es necesario enseñar las mejores formas para procesar información y sacar el mayor  provecho de esta cualquiera que sea el medio de llegada al cerebro transformándola en aprendizaje y estimulando procesos mentales cada vez más reflexivos y complejos. Es el momento de hacernos conscientes que uno de los objetivos educativos más importantes de la educación es enseñar a pensar (Pérez-Rosas, p.13).


 Uno de los principios psicopedagógicos contenidos en las reformas educativas y que además constituye la mayor demanda de la educación es “Aprender a aprender”. No es tarea sencilla ni para el que aprende ni para el que enseña, es decir el docente y el estudiante debido a que no todos tenemos los mismos conocimiento y utilizamos diverso tipo de estrategias, pero si podemos empezar a conocer nuestras habilidades. Sin embargo exige una participación directa y activa de ambos en la tarea. La cantidad tan enorme de información que se genera cada día sólo puede atenderse y entenderse desde la base de los procesos o habilidades mentales. Pero éstas requieren así mismo de estrategias que faciliten al estudiante su desarrollo y aplicación. No es tiempo perdido si se invierte en diseñar estas estrategias y enseñarlas a los estudiantes, porque una realidad innegable es que como seres humanos siempre tendremos necesidad de aprender.


 En conclusión la educación tiene que responder  a nuevos intereses, distintos en mucho a los que se venía respondiendo hace algunos años. Han sido las constantes modificaciones y la rapidez con las que estas  suceden que obligan a pensar que ya no podemos hacer las cosas como las estábamos haciendo, aún con la mejor intención. Se requiere mucho más. Tomar conciencia de lo que realmente es importante en la educación ya que este será como el apoyo  que sostenga nuestro actuar y sin duda alguna, dos tareas importantes las constituyen, las cuales son  el Enseñar a pensar y el Aprender a aprender. Ninguna de las  dos responde a fórmulas milagrosas; ambas requieren de la participación activa de los involucrados. El que tiene la responsabilidad de educar debe centrar su atención en los procesos mentales que participan en el aprendizaje, aprenderlos y entenderlos para que sea capaz de diseñar estrategias que permitan a los que aprenden apoyarse en ellas para optimizar los recursos y aprovecharlos más. El que tiene la responsabilidad de aprender, debe asumir una actitud positiva y participar de manera activa y deliberada en su propio aprendizaje. No basta para el estudiante estar dispuesto a recibir información o instrucción; debe identificar sus propias capacidades y limitaciones, reconociendo en estas los aspectos que las potencializan o las reducen.


“Se aprende es para la vida y no para el momento”

1 comentario:

  1. http://acristofaro.com
    En conclusión la educación tiene que responder a nuevos intereses, distintos en mucho a los que se venía respondiendo hace algunos años. Han sido las constantes modificaciones y la rapidez con las que estas suceden que obligan a pensar que ya no podemos hacer las cosas como las estábamos haciendo, aún con la mejor intención.

    ResponderEliminar